A esto se le suma el hecho de que es muy impulsivo, le cuesta esperar su turno tranquilamente mientras los demás usan sus juguetes favoritos.
Cinco consejos para potenciar la generosidad
1. Procura que compartir sea divertido
Algunos niños y niñas pueden vivir el acto de compartir como que se desprenden de sus posesiones más preciadas, los juguetes. Sin embargo, si le enseñas juegos en equipo en los que todos deben alcanzar una meta común, puedes demostrarle que compartir también tiene una faceta divertida. Además, se recomienda que de vez en cuando le des algo especial que pueda compartir con su mejor amigo o amiga.
2. Preparo con antelación
Antes de que llegue el momento de jugar con sus amigos y amigas, pregúntale qué juguetes no desea compartir. Algunos niños y niñas se aficionan a ciertos juguetes y es comprensible que no quieran prestarlos. A la vez, pregúntale qué juguetes pueden usar y explícale que sus amigos querrán jugar con ellos. Así lo vas preparando psicológicamente para cuando llegue el momento de ceder sus juguetes.
3. Predica con el ejemplo
Las familias son el principal modelo de comportamiento que tienen los niños y las niñas. Esto significa que debes ser generosa, tanto con las personas que te rodean como con tu propio hijo o hija. De hecho, a menudo no nos damos cuenta pero impedirle que toque nuestras cosas puede ser percibido como un acto de egoísmo que después el pequeño repetirá con sus amigos. Si tu hijo o hija se da cuenta de que no tienes problemas para compartir, también lo hará.
4. Enséñale a ser paciente
Los niños y las niñas no se caracterizan por su paciencia, esa es una de las razones por la que suele pelear mientras juega. Por eso, es importante que le enseñes a ser paciente a través de juegos en los que deba esperar su turno. Así, poco a poco irá comprendiendo que si es paciente, todo funciona mucho mejor.
5. Respeta sus posesiones
Antes de coger uno de los juguetes o libros del niño o la niña, pídele permiso, de esta forma también le estarás transmitiendo las reglas básicas de cortesía. Si el pequeño ve que su familia coge sus cosas y no las cuidan o no las devuelven a su sitio, es probable que se muestre más reacio a prestar sus juguetes.
6.No le castigues ni le obligues a compartir
La generosidad es un valor positivo que se debe cultivar a partir del amor y la diversión, no desde las imposiciones. Decirle a tu hijo o hija que se comporta de manera egoísta y castigarle porque no ha compartido sus juguetes solo contribuye a crear un precedente negativo.
En lugar de eso, háblale e intenta que se ponga en el lugar del otro. Recuerda que compartir no implica simplemente prestar los juguetes sino confiar en el otro. Por eso, es importante que el niño o la niña esté listo desde el punto de vista psicológico para desarrollar la generosidad.
Aquí tenéis disponible un cortometraje que os ayudará enseñarle a compartir