¿Por qué el periodo de adaptación en la Escuela Infantil?
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Todos sabemos que los primeros años de visa son los momentos de mayor fragilidad y dependencia emocional de los niños y niñas. Por ello nuestros Centros Escolares Menuts velamos para que los momentos de de adaptación escolar se den en las condiciones necesarias para establecer vínculos afectivos y seguros.
En septiembre y después de unas vacaciones de verano, los niños y las niñas deben adaptarse rápidamente a nuevos horarios familiares y nuevas rutinas escolares.
En nuestras Escuelas Menuts la adaptación necesita un tiempo de dedicación que facilite el deseo de compartir la vida con las maestras, maestros, compañeros y compañeras. Por ello, se realiza una revisión de los principios pedagógicos de todo el equipo docente y tomarlas decisiones para realizarla de una manera optima.
Un periodo de adaptación respetuoso
- Antes de la incorporación del niño o la niña a nuestras escuelas, la familia del alumnado debe reunirse para que ambas partes se conozcan, compartan información para preparar el proceso de adaptación. Durante esta entrevista inicial el niño o la niña se familiarizará en todos los espacios de nuestros centros escolares Menuts.
- Durante el periodo de adaptación, el alumnado podrá llevar a la escuela elementos que le den seguridad para garantizar que se sienta seguro y protegido en la escuela. Las entradas y salidas deben realizarse sin prisas acogiendo, abrazando y respetando al que llora. Respetando en todo momento el proceso individual de cada niño o niña.
- Después del periodo de adaptación, el bienestar del alumnado condicionará la duración de este periodo. Los vínculos de afecto y de seguridad con el Equipo Docente se deben construir poco a poco.
¿A quien implica este periodo?
Hablar del periodo de adaptación es hablar de vínculos, de separaciones, de incertidumbre y de acompañamiento. Se trata de un proceso complejo entre los niños, niñas, familias, maestros, maestras y escuela.
- A la familia, que podrá tejer puentes de confianza en beneficio de su hijo o hija para una educación compartida
- Al niño o niña que entra en un entrono de socialización compartida y aprende a convivir
- A la escuela para establecer relaciones nuevas y facilitar vínculos afectivos nuevos, de seguridad, respetando siempre los ritmos individuales.
«La escuela debe ser un lugar para todos los niños y niñas,
no basada en la idea que todos son iguales,
sino que cada uno de ellos es diferente»
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